El spray protector antimosquitos LaSaponaria es una loción en crema ligera que no es grasosa y se absorbe rápidamente. Fácil de aplicar gracias al dosificador en spray.

Biospray Protector es ideal para redescubrir el placer de estar al aire libre y pasar las tardes de verano tranquilas. Un spray ligero con un aroma delicado que será amado por tu piel pero odiado por insectos y mosquitos.

Contiene geranio y una mezcla de activos vegetales potenciados, no apreciados por los insectos, que protegen la piel de los agentes externos, la hidratan y la calman.

Garantías:

• Sin parafinas o aceites minerales derivados del petróleo

• Sin PEG

• Sin siliconas

• Sin SLS, SLES ni DEA

• Sin Organismos Modificados Genéticamente

• Sin parabenos

• Testado dermatológicamente

• No testado en animales

INCI:

Caprylic/capric Triglyceride, Carapa Guainensis (Andiroba) Seed Oil, Cymbopogon Winterianus (Citronela) Herb Oil*, Melaleuca Alternifolia (Árbol de Té) Leaf Oil, Eucalyptus Globulus (Eucalipto) Leaf Oil, Pelargonium Roseum (Geranio rosa) Leaf Oil, Lavandula Hybrida (Lavandín) Oil*, Mentha Piperita (Menta Piperita) Oil, Tocopherol (Vitamina E), Geraniol, Citronellol, Citral, Linalool, Limonene, Eugenol, Coumarin
*Procedente de la agricultura ecológica y certificada.

Aplicar sobre el cuerpo en las zonas que se quiera proteger.

Precauciones:

• Producto dermo-cosmético para uso externo

• Evitar el contacto con los ojos

• Mantener fuera del alcance de los niños

• Evitar la exposición al sol

• Guardar a temperatura ambiente

La historia de La Saponaria es la historia de una pasión que crece con el tiempo, se convierte en un trabajo y madura de año en año. La misión de La Saponaria es producir cosméticos que sean buenos para el usuario y que tengan un impacto positivo en el medio ambiente y en nuestra sociedad.

Luigi era un niño cuando empezó su colección de jabones y ya entonces llenaba la casa de embriagadores aromas. Los estudios en química y conocer a Lucia fueron el detonante de los primeros experimentos, que comenzaron en el ático de su casa, bajo la supervisión y el consejo de la abuela Gina.

Tradición e innovación se unen, los conocimientos ancestrales se mezclan con el deseo de descubrir y experimentar nuevas soluciones e ingredientes ecológicos y sostenibles.

Ellos mismos hemos construido gran parte de la maquinaria y el mobiliario del laboratorio cosmético, apostando por materiales y herramientas de segunda mano. Continuaron sus estudios y experimentos en el mundo de la química y la ecobiocosmética y nacieron los primeros cosméticos de la marca La Saponaria.

En 2013 La Saponaria se convierte en un trabajo, ¡para nosotros y para otros jóvenes alquimistas aprendices! La Saponaria participa en eventos y organiza encuentros locales para difundir la concienciación y el conocimiento y hablar de cosméticos sostenibles buenos para la piel y para el planeta.
Algunos medios de comunicación empiezan a hablar del proyecto y, mientras tanto, los amigos reales y virtuales aumentan.

Desde entonces hasta hoy, La Saponaria no ha parado de crecer.